Grecia es la cuna de la civilización europea y, como tal, nos ha legado impresionantes ejemplos de arquitectura clásica. Todos ellos, en su momento, fueron fruto de la aplicación de grandes innovaciones artísticas, técnicas y tecnológicas. Desde el partenón hasta el tholos de Atenea o el templo de Apolo, entre tantos otros. Pero no solo eso, sino que gran parte de la arquitectura occidental se basa en aquellos edificios que, en algunos casos, han estado entre nosotros durante miles de años.
Varios siglos después, algunos estudios de arquitectura del país helénico siguen aportando fantásticos edificios, como este, llamado The Koulas Project. Diseñado por el arquietecto Alexis Papadopoulos, se encuentra junto al castillo de Koulas, cuyas torres de vigilancia han servido de inspiración a su forma cuadrada y a las ventanas rectangulares. Pero a diferencia de aquel, esta vivienda se levantó en solo tres días gracias al uso de paneles de hormigón prefabricado que se fundieron en moldes de metal para lograr un acabado perfectamente liso.
Con 170 m2, el edificio se compone de dos volúmenes distintos. Uno de ellos, se extiende a lo largo de un solo piso, mientras que el otro está dispuesto verticalmente e incluye tres niveles. Este último es el volumen principal y el que se inspira en la forma compacta y las pequeñas aberturas de la tipología del castillo. Conformado por dos niveles de espacio interior y un tercer nivel sin techo, encontramos un área de comedor, un área para dormir y un jardín en la azotea.
Junto a este principal, encontramos el volumen secundario que complementa su funcionalidad ampliando los espacios de la planta baja, diferenciándose en forma y materialidad, enfatizando la altura del volumen principal y su presencia dinámica. Al sur, la sala de estar se sumerge en el jardín circundante, mientras que, al norte, el dormitorio se cierne sobre él. “La posición de los volúmenes del edificio, la disposición de las aberturas y los espacios exteriores se diseñaron a partir de los olivos preexistentes, que fueron elementos importantes de la síntesis”, explican sus creadores.
Las fachadas, inspiradas en las torres defensivas, muestran una imagen monolítica e inaccesible, tanto en los muros internos y externos del volumen principal. La técnica elegida se exploró con el método de muros dobles prefabricados en hormigón armado, sin columnas ni vigas. Los muros de hormigón se vaciaron con control robótico en moldes de metal, que dan una superficie perfectamente lisa, y se ensamblaron en el sitio con una grúa en tres días. El aislamiento térmico y los diferentes servicios, diseñados específicamente para cada espacio, se ubican entre los dos lados de los muros de hormigón.
Los materiales también refuerzan la separación de los dos volúmenes. Si bien es cierto que en ambos el hormigón es el material de los muros, el volumen secundario está revestido de madera, material que también se ha utilizado para su estructura. Estos, junto con las texturas naturales y los materiales que se han elegido para el mobiliario fijo, configuran un ambiente interior diferenciado. El rojo del mobiliario fijo del volumen principal, potencian los contrastes materiales de los espacios, a la vez que crean una atmósfera intensa y viva. La selección de accesorios de iluminación sigue los mismos tonos dando al conjunto un sentido espacial unificado.
No cabe duda de que la moda de las casas prefabricadas ha llegado para quedarse. Una tendencia que ha conquistado varios mercados, pero también algunas marcas famosas como AliExpress, Amazon y Leroy Merlin. Ikea no quiere quedarse atrás y ha presentado una nueva mini casa prefabricada de 25 metros cuadrados sobre ruedas. La casa prefabricada de Ikea es portátil, sostenible y ya está amueblada, obviamente, con productos de la marca. Para crear la Tiny House, el gigante sueco colaboró con el especialista en prefabricación Escape y el interior fue diseñado por la jefa de diseño de Ikea, Abbey Stark. La casa prefabricada de la empresa es perfecta para las personas que viven solas y tienen un estilo de vida nómada.
Cada vez resulta más frecuente escuchar hablar del término casa pasiva. A este tipo de viviendas también se las conoce como casa pasiva Passivhaus por el estándar alemán, una certificación de referencia por la que se las conoce a nivel mundial. De hecho, este tipo de hogares son construidos siguiendo los criterios que establecen esta certificación. Muchos se preguntan qué es una vivienda pasiva al escuchar hablar de ellas por primera vez, algo muy común en España, ya que, aunque ya llevan años en el mercado, ha sido en los últimos tiempos cuando han alcanzado su mayor popularidad.
El Pleno del Congreso de los Diputados ha aprobado el proyecto de ley de medidas urgentes para impulsar la rehabilitación de viviendas y edificios que aprobó el Gobierno el pasado otoño, en el marco del Plan de Recuperación. El texto incluye deducciones fiscales, avales e incentivos para invertir en eficiencia energética, así como modificaciones en la Ley de Propiedad Horizontal para facilitar la financiación a las comunidades de propietarios. El texto pasa ahora a tramitarse en el Senado.
El mercado del alquiler todavía sigue arrastrando contratos de renta antigua. Se iniciaron antes del 9 de mayo de 1985 pero han perdurado en el tiempo por la llamada prórroga forzosa que permite al inquilino y a sus familiares permanecer en la casa de por vida o por un tiempo adicional, según los casos. No obstante, Salvador Salcedo, socio del despacho Ático Jurídico, recuerda que la ley de arrendamientos de 194 establece algunas excepciones a esta prórroga forzosa: si el propietario necesita para él o para sus ascendientes o descendientes la vivienda alquilada, podrá hacer uso de ella y poner fin a la renta antigua.
El sector inmobiliario lleva una de las iniciativas de Ada Colau a los juzgados. El sector ha interpuesto un recurso contencioso- administrativo contra la Modificación del Plan General Metropolitano (MPGM) para la mejora urbanística y ambiental de los barrios de Gràcia (Barcelona) promovida por el Ayuntamiento de Barcelona, cuya aprobación definitiva fue publicada el pasado 4 de marzo en el Diari Oficial de la Generalitat.
La crisis sanitaria, la guerra entre Rusia y Ucrania y la inflación están provocando cambios económicos que también inciden en el sector inmobiliario. En este escenario, son muchas las dudas sobre si compensa invertir ahora en una vivienda para destinarla al alquiler. Los expertos siguen apostando por esta alternativa, aunque recuerdan la importancia de factores como la localización del inmueble o su estado antes de tomar la decisión. En líneas generales, los pisos céntricos y reformados recientemente son una buena opción.
La promotora lucense Dmanán construye nueve viviendas en un edificio de cinco plantas en la ciudad de Vigo que contará con el sello Breeam de calidad y sostenibilidad de la construcción. Esta de obra nueva está en el mercado desde 294.500 euros, cuentan con dos y tres habitaciones y unos 130 m2. Un edificio sostenible ahorra entre un 50% y 70% del gasto energético común, además de un 40% menos de agua y un gasto en mantenimiento que alcanza el 8%.